miércoles, 12 de octubre de 2011

PERRA.

Suelo pensar las cosas más de dos veces antes de actuar con respecto al "amor". No sé por que, simplemente es un reflejo, una seguridad extra para que nadie llegue a mi corazón, porque prefiero que continúe feliz en su burbuja. A veces la gente cree que soy rara, a veces hasta yo pienso que soy rara, pero creo que me gusta ser así, y no quiero cambiar mi forma de ver las cosas, aunque sea rara. Por otro lado, me pasa todo lo contrario con los amigos, con la gente en la cual confío, soy una de las personas que se encariña muy fácilmente con todo el mundo. Solo con ver un árbol, un pájaro un arcoíris, mi mente flota en un mundo de felicidad absoluta, me siento feliz con una persona a mi lado, tan solo con verla, mis ojos, la analizan y generalmente me acerco y me encariño. Y muy pocas veces me han herido, por lo que le confío todo mi corazón a mi primera visión. Pero el viernes fue diferente, yo enserio pensé que ella se preocupaba de mi, de mis sentimientos, como una amiga.. no la conocía muy bien, pero confié en ella, tan solo porque cuando se me presentaba la posibilidad de ayudarla, yo lo hacía, la ayudaba sin pensarlo dos veces, jamás se me pasó por la mente, ni siquiera una vez, traicionarla, contar lo que me había dicho, hacerla sufrir. ¿Pero cómo me lo devolvió? Já buena pregunta.. burlándose de mi, despreciándome, hacerse la mosquita muerta hasta más no poder, confundiéndome, yo ya no sabía si ella lo había hecho a propósito o yo me lo había imaginado. Si las cosas en verdad eran como yo creí o estaba exagerando. Lo único que se es que estoy pasando por etapas, al principio cuando me dijo esas palabras que yo pensé que nunca iba a tener que escuchar pensé que era broma, pensé que una persona no iba a ser tan CERRADURA, para al día siguiente me dijera eso, me hiciera sentir tan miserable, y todo bajo un manto de sutileza y descaro. Bueno en ese presiso instante sentí la necesidad de asesinarla, pero leeeeeenta y dolorosamente, tan cual ella lo hizo conmigo, osea que mi primera etapa fue: El enojo, si. Luego de estar un día queriedo hacer una sopa de carne con sus entrañas, pasé a la segunda y mas autodestructora etapa II, la cual eees: La depresión, empecé a creer que era una mierda y como no me iba a cambiar, si yo era asquerosa, tonta, inmadura, inocente, el necesitaba a alguien que fuera como ella, dulce por fuera y amarga por dentro, capaz de hacer todo lo que estuviera a su alcance por conseguir su objetivo, así sea hacerse "amiga" de la inocente milagros, y destruirla por dentro, de las cosas que uno se entera después. PERRA.

No hay comentarios:

Publicar un comentario